En junio del 2013 se cumplieron 50 años desde que el escritor argentino Julio Cortázar publicó su libro más conocido, “Rayuela”. A propósito de la conmemoración del cumpleaños del célebre escritor, Ricardo Gonzales Vigil nos da cinco claves para acercarnos a este libro que sigue vigente para diversas generaciones.
El juego: La novela está planteada como un juego de niños porque Cortázar considera que la imaginación literaria es muy parecida a la de un niño cuando juega. Es por eso que la obra convierte al lector en copiloto y el libro te da una tabla de posibilidades para leer de diversas maneras. En su libro “Vuelta al Día en 80 Mundos”, se inventa una máquina la rayuelomatic que calcula todas las lecturas que se puede hacer con Rayuela, es el juego de la libertad. El texto no solo exige que lo entiendas sino que lo maneje uno mismo e invita a la actitud abierta, tolerante, inclusiva y experimental.
El lenguaje: En este libro, Cortázar inventa un idioma que se llama glíglico, que es inventado por La Maga, personaje de la obra, y que es una especie de español rehecho rítmicamente, que también parece producto de un juego. Es como lo que llama Alfonso Reyes, jitanjáfora, como la frase de tín marín de do pingüé. En Rayuela, se inventa un lenguaje juguetón, libre, imaginativo y musical.
Los opuestos complementarios: La cultura actual está muy abierta y busca un diálogo entre occidente y oriente. Cortázar mencionaba que su novela es un mándala, que es un diseño gráfico de la India que lleva a la meditación, entonces en la obra pone figuras opuestas que uno debe descubrir cómo se juntan, que son complementarias. La visión del Hinduismo de la unidad brota de los contrarios. Es por eso que Rayuela moviliza opuestos que existen solo en la medida en que se complementan con el otro. Es una invitación a la meditación.
La música: Se da mucha importancia a la música y al jazz. Hay un “Circulo de la Serpiente” que junta a los fanáticos del jazz y a Cortázar siempre le gusto porque es una música que permite crear con libertad abierta a la experimentación. Por ejemplo, hay un cuento de Cortázar que se llama el “Perseguidor” cuyo protagonista es un músico de jazz que está buscando, a través de la música, salir de lo establecido y llegar a lo absoluto como una forma de liberación. Creo que los jóvenes sienten que el jazz o el rock son una forma de contracultura, salir de lo cotidiano. La música mantiene una capacidad casi dionisiaca de mover a la multitud y esta novela tiene estos recursos.
El amor: También, se le puede considerar como una novela de amor. Trata de dos parejas, la que tuvo en Buenos Aires, Talita, y la que estaba en Paris, que es La Maga. Dos tipos de amor, de amar, una mujer lo obliga a pensar en lo cotidiano, pragmático, mientras que la otra lo mantiene más enfocado a la meditación y espiritualidad. Dos tipos de amor que pueden atraer al lector.
FUENTE: Puntoedu / Lima, 31 de agosto de 2015