Patricia del Río | El Comercio
Una novela distópica proyecta futuros sombríos. Imagina mundos donde el autoritarismo y las ideologías extremas se apoderan de la sociedad. Mundos en los que la libertad de pensamiento o el derecho a la insubordinación no existen. Mundos en los que la naturaleza se depreda en favor de supuestos futuros más prósperos. Si la utopía es la proyección del paraíso, la distopía es la del infierno.
Últimamente uno percibe demasiados indicios que nos acercan a esos futuros distópicos, en los que las libertades alcanzadas por el ser humano se ven amenazadas por corrientes irracionales y discriminatorias. En la novela “1984”, George Orwell proyecta una sociedad donde el poder lo controla todo, donde la vigilancia masiva es extrema y se manipula el lenguaje para dominar el pensamiento… Leer más