Héctor Porto | La voz de Galicia
El escritor argentino Ricardo Piglia (Adrogué, 1941-Buenos Aires, 2017) trabajó en sus textos hasta el último aliento, cuando la grave enfermedad que padecía, ELA (esclerosis lateral amiotrófica, que le habían diagnosticado en el 2014), lo venció e inhabilitó totalmente hasta causarle la muerte. Para entonces, con un tesón admirable, había ordenado aquellos 327 cuadernos de tapas de hule negro -guardados en cuarenta cajas de cartón- que contenían las anotaciones diarísticas que había iniciado con apenas 16 años, allá por 1957. De esta forma, dejó listos los tres volúmenes de Los diarios de Emilio Renzi, aunque no llegó a ver cómo se completaba su publicación. Ultimó casi de un modo milagroso los cuentos policíacos que integran el tomo Los casos del comisario Croce, como él mismo explicaba en la acotación final datada en marzo del 2016, con la sola, afanosa y lenta contribución del músculo óptico: «Compuse este libro usando el Tobii, un hardware que permite escribir con la mirada. En realidad parece una máquina telépata. El interesado lector podrá comprobar si mi estilo ha sufrido modificaciones», desafiaba no sin cierto humor. Las pesquisas del kantiano funcionario afloraron cuando la enfermedad le había paralizado el cuerpo de manera implacable, por lo que resulta aun más sorprendente su frescura y su pujanza narrativa… Leer más