“No cualquiera puede ser un gran artista,
pero un gran artista puede venir de cualquier lado”.
Artículo de Anton Ego, Ratatouille.
Si un artista de la misma calidad de Juan Diego Flores hubiera nacido en un remoto centro poblado a días en lancha de la provincia más lejana de una de las regiones de la selva peruana, es muy probable que pensemos que de adulto seguramente se dedique a cualquier otra cosa que explotar su gran talento. ¿La razón de ello? La enorme desigualdad social en la que vivimos.
El enfoque de las capacidades de Amartya Sen nos compele a visualizar la igualdad como la probabilidad que tienen las personas de alcanzar sus metas y sueños. Para que podamos afirmar que un artista como Juan Diego Flores podría venir de cualquier lugar del Perú, tendríamos que GARANTIZAR que todas las personas en todas las latitudes del país podrían tener la misma oportunidad (o libertad, en términos de Sen) de seguir sus sueños. Para Sen, en la medida que un individuo pueda desarrollar sus oportunidades, obtiene libertad. De la misma manera, un país que garantiza que toda persona puede desarrollarse según sus capacidades sin distinción es un país que invierte en su población. Por lo tanto, la “falta de libertad” que podríamos atribuir a varios peruanos solo por haber nacido en una zona remota es responsabilidad exclusiva del Estado y sus políticas de desarrollo.
La Selva Peruana es el territorio más grande de nuestro país si lo pensamos en las clásicas tres divisiones: Costa, Sierra y Selva, representa más del 60% del territorio. Es el hogar de la mayor cuota de diversidad lingüística y cultural de la región, con más de 44 lenguas originarias repartidas en pueblos milenarios. También es el territorio con mayor cantidad de recursos hídricos, recibiendo en el caudal del Amazonas un correspondiente al 80% del agua de todo el país. Sin embargo, inexplicablemente el 60% de la población vive en la Costa, donde desemboca apenas el 2% del agua del país. Pero no es la única incoherencia en nuestra forma de tratar a un lugar del país tan rico e importante.
La selva peruana también es la tierra peruana más rica en diversidad de flora, fauna, ecosistemas, posibilidades de producción de una miríada de productos, etc. Sin embargo, es una de las zonas con las dificultades geográficas y lugares más apartados e inaccesibles de todo el país. También es la zona del Perú más afectada por la reunión de actividades ilegales: tala, minería, narcotráfico, trata de personas y con el brazo armado de los remanentes del terrorismo que les brinda su apoyo. Por lo tanto, también es la zona de donde más migran los jóvenes a la ciudad. La región de Madre de Dios es la única región del país que decrece poblacionalmente año a año por la enorme cantidad de jóvenes que deciden emigrar, hartos de la falta de voluntad política frente a la ingente destrucción de la Amazonía y de sus oportunidades de desarrollo.
A pesar de toda esa muy diversa riqueza natural, étnico-cultural y material, la penetración de una educación de calidad ha sido muy escasa. Así lo evidenció la necesidad de aplicar curva para los postulantes de Beca 18 – y de los COAR cuando anteriormente el examen de ingreso repartía las plazas a nivel nacional. Era entonces necesario habilitar una cuota específicamente de la Selva peruana, dado que no solían llegar a los mínimos básicos para hacerse acreedores a determinados servicios. Esto se debe a que las zonas de la selva peruana son las que más cuentan con escuelas unidocente-multigrado, entre otras formas bastante precarizadas de educación básica.
Además de ello, justamente por la presencia de una diversa riqueza étnico-cultural ya mencionada en esta región, se necesitan tomar consideraciones para la correcta intervención educativa en estas zonas. Es decir, justamente en esta vasta región que ha sido muy abandonada es donde de hecho se necesita mayor especialización, focalización y estrategias de abordaje en conjunto, como enfoque territorial, educación intercultural bilingüe, enfoque de desarrollo rural, etc.
Con tantos hándicaps, ¿cómo esperar encontrar talentos en la Amazonía? Según Mensa Internacional, la asociación mundial de superdotados, el 2% de la población mundial presenta superdotación. Según Gagné, los talentosos son aquellos estudiantes que superan al 90% sus compañeros en cualquier materia. Según Renzulli, hasta el 15% de estudiantes podría integrar los programas para altas capacidades. Por tanto, podemos tomar estas proyecciones estadísticas y aplicarlas en las regiones de la selva, y encontrar que tenemos decenas de miles de posibles superdotados y centenas de miles de posibles talentosos y con presuntas altas capacidades.
Cualquier programa que considere seleccionar y atender a estudiantes superdotados y talentosos en estas localidades, tendría que tomar en cuenta todas estas recomendaciones además de las propias estrategias para el trabajo con los estudiantes con altas capacidades. Lo cual resulta lógico, los programas educativos rurales y con minorías étnicas necesitan representar el mundo visto desde la ruralidad y considerar las particularidades culturales, lingüísticas e idiosincráticas de los grupos étnicos, como sus costumbres, su cosmovisión, la importancia de la relación con el entorno, el agua, la tierra, los elementos, la flora y fauna, etc. Todos estos aspectos tendrían que ser considerados por los gestores de proyectos educativos locales.
El informe “Amazonía, educación y desarrollo sostenible”, documento de estudio publicado por UNESCO y Porticus (2023), concluye que para que los modelos educativos a implementar en estas zonas sean pertinentes, deben tener en cuenta los aspectos singulares de las comunidades indígenas y no-indígenas de las Amazonía, comprender el paisaje, los obstáculos y las perspectivas de los pueblos de esta región en particular.
El informe mencionado también afirma que es necesario que todos los proyectos educativos que se apliquen en la Amazonía peruana incorporen procesos de inmersión sociocultural y ecológica antes, durante y post implementación, asegurando la inclusión de las miradas, voces y perspectivas locales, algo que suena muy lógico, y que de un tiempo a esta parte, han venido haciendo los proyectos relacionados con el sector salud, como la unión de médicos y sheripiaris (shamanes curativos).
También es necesario capacitar a las organizaciones indígenas y otras comunidades tradicionales para que sean ellas mismas las principales gestoras e impulsoras de las escuelas y los proyectos educativos. Esto es importante por varias razones, porque asegura que sea la propia comunidad organizada la que asuma la responsabilidad de educar a sus niños, porque asegura la continuidad de aspectos culturales y lingüísticos originarios y porque facilita la participación de cada vez más niños provenientes de estas poblaciones. También porque facilita el proceso de comprensión de las demandas educativas de cada territorio, a partir de los modelos de servicios educativos actuales, identificando las necesidades de implementación de los diferentes modelos de servicios educativos, o promoviendo la creación de servicios educativos alternativos, con mirada local.
Otra recomendación es la de garantizar que los profesores conozcan y sean sensibles al contexto cultural e intelectual de las comunidades tradicionales de la Amazonía. Esto pasa por sensibilizar a los docentes que vayan a enseñar a estos lugares, como también promover la participación de la comunidad en la generación de nuevos perfiles profesionales docentes. Esto pasa también por asegurar que la formación inicial docente considere la realidad rural e indígena, a partir de la mejora y actualización de los planes de las escuelas pedagógicas y facultades de educación en la Amazonía.
También se señala la importancia de diseñar especializaciones en gestión y administración educativa con enfoque territorial y de EIB para directores, funcionarios y especialistas en los diferentes niveles, desarrollar planes de profesionalización o titulación de los docentes que trabajan sin título o no tienen mención en EIB, modalidades de becas y programas especiales con subvenciones para la formación de docentes bilingües o bien sistemas como el SERUM pero para el sector educativo para las escuelas rurales más disperas y con mayores necesidades.
Por otro lado, también es fundamental mejorar las condiciones de los docentes que ya se encuentran trabajando en las zonas rurales e indígenas amazónicas. Para ello, es recomendable el desarrollo de planes de acompañamiento pedagógico a partir de la experiencia del PELA, la priorización de plazas docentes para instituciones EIB con docentes bilingües y/o con formación en EIB, y la facilitación de lugares de alojamiento dignos para los docentes de áreas rurales. ¿Los Tambos del Proyecto País del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social podrían ser una opción?
Respecto al acceso a la educación de calidad, además de ampliar la cobertura con énfasis en los niveles inicial y secundaria, se menciona la intervención en dos aspectos. La prevención, en el nivel inicial, para asegurar que los niños lleguen a la primaria con las habilidades necesarias; y en la compensación, para identificar fallas en los predictores asociados al aprendizaje escolar de estudiantes de primaria y secundaria que los estén limitando en la continuidad de sus aprendizajes.
Finalmente, respecto a la educación superior, el citado informe recomienda identificar las rutas o caminos más convenientes para transitar de la educación básica a la técnico-productiva y superior-tecnológica en términos de acceso, continuidad y conclusión de su formación. Esto requiere la planificación de programas de certificación de competencias de alta demanda laboral con enfoque territorial vinculados a iniciativas productivas viables de ONG y otros actores locales. También el fortalecer o crear servicios de internado para estudiantes indígenas en universidades, o diseñar nuevos modelos de formación universitaria para el contexto amazónico.
¿Entonces, qué tan viables son los programas de atención de altas capacidades en la Amazonía? De prioridad 1, naturalmente. No solamente hay estudiantes con altas capacidades, no solo necesitan la forma de atención, necesitan explotar sus capacidades, talentos e intereses. Necesitan desarrollar su creatividad, automotivación y autonomía. Necesitan un servicio que los catapulte desde primaria hasta el COAR o BECA 18 hacia el final de la secundaria. Necesitan explotar su sensibilidad artística, cognitiva y socioemocional. Necesitan socializar esos sueños con otros compañeros igual de sensibles, creativos y despiertos. Necesitan experimentar su relación con el entorno de una manera que desarrolle y estimule su creatividad e innovación, para imaginarse nuevas formas de desarrollo. Necesitan estimular sus sueños y sobre todo, necesitan soñar que es posible que sus sueños se hagan realidad.
Lima, 20 de julio de 2023