Arturo Sulca / El Arte y el Diván
Este texto es una respuesta diferida a la pregunta de un muy querido alumno de la Universidad Ruiz de Montoya. Me interesa reflexionar sobre la apuesta ética, estética e impolítica de mi práctica docente tanto dentro como fuera del aula. Procuraré explorar la propuesta de que un profesor (de repente no solo de literatura) es quien llama hacia un deseo de saber, es quien da la posibilidad de que el otro abrace sus búsquedas, sus rumbos hacia el armazón de una imaginación radical y creadora y un pensamiento crítico y autónomo. Estoy convencido –a estas alturas de mi vida- de que esta labor pasa por el amor, entendido como aquel vínculo urdido sobre la gratuidad del don (aunque, de pronto, todo dar sea imposible)… Leer más