Cuatro mitos sobre evaluación diagnóstica:
a) Se puede evaluar con un solo instrumento. Como toda evaluación de aula, no se puede evaluar con un solo instrumento. Se necesita una diversidad de evidencias para poder decir algo sobre el desarrollo de la competencia. Recoger diversidad de evidencias no quiere decir cantidad sino de distinto tipo: evidencias escritas, orales, individuales, grupales, experimentales, formales, informales. De allí que también se necesita diversos tipos de instrumentos de evaluación. Es decir, la evaluación diagnóstica no podría limitarse a una prueba de opción múltiple.
b) Se puede evaluar en una sola sesión o semana. No. Todo problema planteado que realmente movilice todas las capacidades de una competencia requiere de un tiempo más largo. Se necesita, además, diversidad de evidencias
c) Se evalúa desempeños. No. La evaluación por desempeños aislados no es una evidencia consistente sobre el desarrollo de la competencia. Se evalúa la competencia. No capacidades por separado. Menos desempeños aislados por cada sesión. Por eso, se trata de plantear situaciones significativas que pongan en juego todas las capacidades en simultáneo.
d) Asigna niveles de logro. La evaluación diagnóstica no asigna niveles Satisfactorio, En proceso y En Inicio. Eso es parte de la evaluación sumativa o calificativa. La evaluación diagnóstica bien entendida permite reconocer algunos aciertos y dificultades de los estudiantes para ir ajustando la planificación y estrategias de enseñanza cada cierto tiempo. De hecho, la exploración diagnóstica ya es parte de toda evaluación formativa y se hace de forma permanente. Cuando se dice que la evaluación diagnóstica permite visualizar los niveles de aprendizaje de cada estudiante, es a grosso modo, tener una panorámica de sus habilidades.
A modo de conclusión, quisiera compartir una cita del Currículo Nacional y otra de la RVM 094-2020:
“Es importante considerar que la adquisición por separado de las capacidades de una competencia no supone el desarrollo de la competencia. Ser competente es más que demostrar el logro de cada capacidad por separado: es usar las capacidades combinadamente y ante situaciones nuevas.”
CNEB (pg 22)
“En última instancia, el objeto de evaluación son las competencias, es decir, los niveles cada vez más complejos de uso pertinente y combinado de las capacidades en el marco de una experiencia de aprendizaje”
(RVM 094-2020)
Lima, marzo de 2025