Edición 47

Alianzas para el intercambio

La fórmula es simple: conectar para aprender

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Lizbeth Pasco Carmona | EDUCACCIÓN

Conocí a Trish, Heather y Giana de WAKE International gracias a un gran amigo de Enseña Perú, Franco Moso. En resumen, me dijo que vendrían a Cuzco y que los temas en común eran suficientes para que surgiera algo interesante: tecnología, educación, empoderamiento de la mujer e intercambio con diversas culturas.

Actualmente, trabajo en un colegio llamado GAL School, que busca formar personas que no solo analicen de manera crítica y constructiva, sino que actúen como agentes de cambio. Por otro lado, WAKE International es una ONG que busca establecer alianzas entre mujeres para el intercambio de conocimiento. Su misión es potenciar el trabajo de las organizaciones y activistas enfocadas en la igualdad de género y justicia social, mediante la creación de conexiones, herramientas, entrenamiento y recursos. Todo con un lente feminista.

En Cusco, planificaron tres actividades durante la semana en la que estarían aquí. La primera fue brindar asesoría a micro y medianas empresarias de esta zona para ayudarlas a mejorar sus emprendimientos a través de voluntarias de Silicon Valley (Salesforce, Google, YouTube, General Electric, entre otras empresas). La segunda, entrenar a profesoras del colegio Chicuchas Wasi en la utilización de “Rachel” (un servidor que incluye Wikipedia, Khan Academy y otras plataformas educativas) y realizar actividades con las estudiantes; y por último, la tercera, llevar a cabo una Feria Tecnológica y de Carreras para adolescentes.

Chicuchas Wasi

Mi primera tarea fue conocer Chicuchas Wasi, una escuela para niñas de zonas vulnerables que se encuentran en alto riesgo (violencia en toda su dimensión). Ruth, una de las fundadoras de la escuela, me explicó que el camino a la escuela no existía en Google Maps y que ella prefería llevarme. Mientras manejaba me contó parte de la historia de la escuela. Habló de Rae, la mujer que fundó la ONG para atender y alimentar a niños de la calle y cómo fue que allí se conocieron y empezaron a pensar de qué manera solucionar el problema que veían diariamente. Ruth contaba que en algún momento dieron talleres técnicos para darles otras opciones de empleabilidad a las mujeres de la zona, pero a medida que conocían el espacio notaban que el problema era más complejo. Varias mujeres estaban convencidas de que la única manera de ser respetadas era siendo parejas de algún hombre, en una relación que era evidentemente desigual y en muchos casos violenta (sexual, física o psicológicamente). “Soy profesora de inicial. Yo tenía claro que necesitaba formarlas desde pequeñitas, para que entiendan su valor”, explicó. El colegio se armó con donaciones y muchas cosas hechas por las propias manos de las fundadoras.

Al llegar a la escuela, conocí a Gloria, la subdirectora, y a todas las profesoras, escuché las historias de sus estudiantes y pensamos en las posibles actividades que podríamos hacer con ellas mientras durara su capacitación. Nos dimos cuenta de que una primera dificultad entre las niñas y las voluntarias estadounidenses sería el idioma, fue allí que decidimos que un grupo de estudiantes bilingües de GAL School serían el puente entre ambos grupos.

Charlando. Foto: Jorge Castro Gutiérrez
Recibiendo un regalo de las niñas de inicial. Foto: Jorge Castro Gutiérrez

Feria Tecnológica y de Carreras para adolescentes

El objetivo de la Feria fue dar una experiencia de acceso a jóvenes a través de un taller vivencial donde puedan intercambiar ideas, perspectivas y experiencias con las voluntarias de WAKE International: ingenieras, gerentes de proyectos, ejecutivas y especialistas en recursos humanos de las compañías que mencioné al inicio. Los trabajos tecnológicos se perfilan como las carreras del futuro, ofrecen flexibilidad, son bien remunerados y, además, ofrecen una nueva manera de solucionar problemas.

Otro punto importante fue que, si bien la Feria no estaría cerrada solo a mujeres, ellas serían la mayoría. ¿Por qué? En Estados Unidos, las mujeres tienen solo el 20-30%[1] de los empleos en la industria de la tecnología, en base a ese dato, imaginemos cómo está esa distribución en Perú. Aumentar la diversidad e igualdad en este y en cualquier otro ámbito es igual a más innovación.

Cuando pensamos en la feria teníamos claro que nuestro público objetivo no serían solo las estudiantes de GAL School, sino también otras estudiantes de colegios aledaños. Visité alrededor de seis colegios e instituciones en Cusco y varios se mostraron interesados, pero solo dos de ellos cumplieron con el (único) requisito de enviar la lista de nombres de las asistentes y del docente que las acompañaría, San Vicente de Paul e IPCNA-Cusco.

Se planearon dos actividades principales: “I am remarkable” y sesiones en pequeños grupos (Habilidades para las entrevistas, Tarjetas madre y Mentoría de carreras). El evento inició con una pequeña presentación de cada una de las voluntarias, quienes daban una pequeña reseña de su carrera e intereses personales, de manera que las y los estudiantes puedan elegir a dónde ir al momento de iniciar las sesiones en pequeños grupos.

Voluntaria. Foto: Jorge Castro Gutiérrez
Estudiantes atentas. Foto: Jorge Castro Gutiérrez

La actividad “I am remarkable”, liderada por Kaneka Raney, es una iniciativa para empoderar a las mujeres, así como a minorías para celebrar sus logros a nivel profesional y personal. Este taller de 90 minutos resalta la importancia de la autopromoción y brinda herramientas para desarrollar esta habilidad.  Todo se desarrolla a través de una consigna: Reflexiona, escribe y comparte por qué eres extraordinaria… sin caer en respuestas fáciles como: “soy una buena hija” o “soy una buena estudiante”. A medida que la actividad avanza se evidencia lo difícil que es reconocer nuestros logros; por eso, el momento más emocionante de la sesión fue cuando una estudiante dijo: “Soy extraordinaria porque tengo las mejores notas a pesar de que mi papá siempre diga que las mujeres solo servimos para hacer las cosas de la casa”.

Kaneka, inspiradora. Foto: Jorge Castro Gutiérrez

Extraordinaria. Foto: Jorge Castro Gutiérrez

Construir nuestra historia de éxito. Foto: Jorge Castro Gutiérrez

Reflexión final

La escuela tiene que estar abierta a la comunidad en toda su amplitud. Hay muchísimas maneras de establecer alianzas y con un objetivo claro, se pueden lograr conexiones que sumen al desarrollo de los y las estudiantes, y de todos los que estamos alrededor.

Cusco, 09 de noviembre de 2018

[1] United States Department of Labor, 2016.

Para citar este artículo en APA:

Pasco, L. (2018). Alianzas para el intercambio. Educacción, Año 4 (47). http://ow.ly/eh7w30mHTJW

Lizbeth Pasco Carmona
Psicóloga especialista en diversidad, equidad e inclusión en espacios educativos y alumni de Enseña Perú. Actualmente coordina el Programa de Becas del Colegio Roosevelt. Trabajó diseñando estándares docentes en la Dirección de Formación Docente en Servicio, y en la Dirección de Evaluación Docente (MINEDU). Ha planificado, ejecutado y evaluado proyectos de acompañamiento, capacitación, clima y cultura para ONGs, empresas e instituciones públicas. Además, ha desarrollado proyectos de lectura, escritura y expresión oral para mejorar habilidades personales e interpersonales de adolescentes.