Modesto Montoya / Revista Ideele
En las elecciones presidenciales del 2016, la ciencia y la tecnología no parecen ser importantes en las campañas de los partidos políticos. Varias destacadas instituciones científicas y tecnológicas convocaron a los candidatos presidenciales para que, en el Teatro de la UNI, presenten sus planes en educación superior, ciencia, tecnología e innovación. De los 19 candidatos, acudieron Verónica Mendoza, Francisco Diez Canseco, Alfredo Barnechea, Miguel Hilario, Daniel Urresti. Los otros candidatos enviaron representantes o simplemente ignoraron la invitación.
El histórico desdén de los políticos por la ciencia y la tecnología ha impedido que el Perú deje su situación de país primario exportador. Su retraso es confirmado por los estudios de las instituciones internacionales que analizan el desarrollo de la ciencia y la tecnología en el mundo.
Según la revista Nature, en el 2013 Perú estaba detrás de Chile, Colombia y Venezuela.
Tomando la base de datos Scopus de Elsevier 2013, en el año 2014, la revista Nature analiza la producción científica y tecnológica de los países de América del Sur1. Brasil tuvo 46. 306 publicaciones. En los últimos 20 años, Brasil ha quintuplicado su producción en ciencia. Más de los dos tercios de la producción de América del Sur corresponden a este país, el que cuenta con el Ministerio de Ciencia y Tecnología y una carrera del investigador científico y tecnológico. Argentina tuvo 9.337 publicaciones. La investigación de Argentina, que cuenta con el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y una carrera del investigador científico y tecnológico, tiene ahora un impacto por encima del promedio mundial. Chile contó con 6.794 publicaciones. Gran parte de su éxito es su altamente citado trabajo de colaboración en el genoma de la papa. Colombia presentó 4.556 publicaciones y Venezuela tiene 1.315 publicaciones.
Perú alcanzó 1.044 publicaciones. Los artículos más citados incluyen trabajos de prevención de HIV, tuberculosis y lupus.
En el 2013, Brasil lideraba y Perú estaba en la cola. Entre 2008 y 2012, más de los 3/4 de las publicaciones peruanas y menos de 1/4 de publicaciones brasileras involucran colaboración con otros países. De hecho, según Nature, los países menos desarrollados de la región son en general más propensos a colaborar con países fuera de América del Sur.
Las universidades peruanas siguen retrocediendo en el mundo
Las universidades son los principales generadores de conocimiento científico y tecnológico. La calidad de las universidades del mundo es medida por diversas instituciones internacionales. Entre las 500 mejores universidades del Ranking Académico de las Universidades del Mundo en 2015, elaborado por la Universidad de Shangai, no aparece una universidad peruana.
En el Ranking Expandido 20152, que toma en cuenta solo las universidades iberoamericanas, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos ocupa el puesto 125, perdiendo 11 lugares, respecto al 2014. La Universidad Peruana Cayetano Heredia ocupa el puesto 146, perdiendo 8 lugares, respecto al 2014. La Pontificia Universidad Católica del Perú ocupa el puesto 175, ganando 10 lugares, respecto al 2014. Podemos decir que del 2014 al 2015, las tres universidades peruanas en conjunto han perdido 8 lugares.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) señala que el Perú muestra poco progreso en ciencia y matemáticas3. Los gobiernos nos dicen que estamos progresando en educación. Sin embargo, los indicadores objetivos nos muestran otra realidad: los gobiernos no han logrado que los niños se interesen en la ciencia, sin la cual todo esfuerzo es vano.
En el Ranking de países sobre Impacto en la Innovación, de la Fundación para la Información sobre Tecnología e Innovación, entre 56 países, el Perú ocupa el puesto 484.
Desarticulado sistema de ciencia y tecnología
El solo hecho de que un ministerio de ciencia y tecnología obligue a que se toque el tema en el Consejo de Ministros justifica su creación. Actualmente no se escucha la palabra ciencia en las reuniones de los ministros.
La carencia de esta institución ha permitido una desarticulación de lo que podría ser un sistema de innovación. En el Consejo de Ministros, donde se toman las decisiones políticas más importantes, no existe la voz del sector ciencia, tecnología e innovación. Como consecuencia de ello, no existe una real política coordinada de ciencia y tecnología.
Los institutos de investigación dependen de cada sector y se mantienen aislados entre sí. Dado que los problemas son interdisciplinarios, cuando se presentan se inicia un proceso de difícil coordinación.
Los científicos que se oponen a la creación de un ministerio temen que se burocratice y consuma los recursos dedicados a la investigación. En realidad, sin ministerio existe una burocracia sin poder y, por lo tanto, impotente.
El Dr. Abraham Vaisberg, presidente de la Academia Nacional de Ciencias del Perú, nos dijo lo siguiente: “Podría ser interesante por el hecho de tener asiento dentro del Consejo de Ministros; pero, por otro lado, conociendo lo que ocurre, muchas veces en el Perú, la burocratización de las instituciones, no vaya a ser que terminemos con un monstruo y todos los fondos se vayan a mantener el monstruo”.
Conclusión
De las diversas entrevistas con científicos y líderes de la investigación, se desprende que es necesario una carrera del investigador y un ministerio de ciencia y tecnología, siempre y cuando no se burocratice. De lo contrario, el Perú seguirá en la cola de la ciencia y la tecnología mundial, cada vez más adicto a la explotación de recursos naturales, con las conocidas consecuencias de contaminación del ambiente y las tensiones sociales en las regiones involucradas.
Fuente: Revista Ideele N° 238 / Lima, marzo de 2016
1http://www.nature.com/news/the-impact-gap-south-america-by-the-numbers-1…
2http://dicits.ugr.es/rankinguniversidades/wp-content/uploads/2014/05/Sha…
3http://www.oecd.org/fr/education/aider-les-eleves-les-plus-faibles-est-e…
4https://itif.org/publications/2016/01/20/contributors-and-detractors-ran…
