Ana Torres | El País
La seguridad de los centros educativos está consumiendo casi todas las energías y concentrando el debate público en esta vuelta a las clases en mitad de una pandemia que no deja de ofrecer cifras preocupantes; ya hay más de medio millón de casos en toda España. Pero una vez decidido que es imprescindible reabrir las escuelas, tal y como defiende la ONU, para evitar una “catástrofe generacional”, sobre todo entre los alumnos más desfavorecidos y con menos conexión a Internet, hay que resolver otro gran problema: ¿qué y cómo se va a enseñar a los alumnos en estas circunstancias excepcionales? La realidad es que, mientras los docentes trabajan a marchas forzadas para adaptar los programas académicos, centrándose en contenidos esenciales e integrando los temas imprescindibles para seguir adelante que no se llegaron a ver el año pasado, se hace más presente que nunca el debate, arrastrado desde hace años, sobre si el currículo educativo español es demasiado extenso, enciclopédico y anticuado… Leer más