Los padres de la escuela pública piden que se eliminen los deberes

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Pilar Álvarez / El País

La confederación de familias Ceapa reclama un debate “profundo” sobre los horarios y tareas y que los exámenes de septiembre sean en julio

La Confederación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa), que representa a 12.000 asociaciones de familias de los centros públicos, quiere que los alumnos no tengan deberes fuera de su jornada escolar. Los padres piden un debate “profundo” sobre esta actividad y sobre el calendario de clases de los estudiantes. Los representantes de las familias con hijos en la escuela concertada católica (Concapa, con 2.500 asociaciones) reclama también que se abra ese debate aunque, en su caso, no rechazan que se manden tareas obligatorias para casa.

“Hemos recibido cientos de quejas de familias que nos muestran su desacuerdo de cómo la jornada escolar se está trasladando a los domicilios”, ha explicado Jesús Salido, presidente de Ceapa, en la rueda de prensa de valoración del inicio de curso, que han calificado como “caótico” por la ampliación de la implantación “a la carrera” de la reforma educativa. La LOMCE (Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa) se extiende este septiembre a todos los cursos de primaria, los impares de secundaria y 1º de bachillerato.

La confederación de familias considera que los deberes “generan una presión institucional hacia al alumnado”. “Si no los hacen pueden llegar a bajar nota”, señala Salido. “Los chicos hacen seis y siete horas de clase diarias más otras dos o tres horas de deberes, no tienen los fines de semana libres ni tampoco las vacaciones”, añade José Luis Pazos, tesorero de Ceapa. Según sus estimaciones, las jornadas que soportan los estudiantes pueden llegar a “60 horas semanales”. “¿Algún adulto lo admitiría? ¿Sus docentes aguantan 60 horas de trabajo?”, se ha preguntado el portavoz, que pide que los deberes sean siempre actividades “voluntarias” para los chicos.

6,5 horas semanales, según la OCDE

España está entre los países en los que los alumnos de 15 años destinan más horas a las tareas en casa, según la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). Este organismo, responsable del informe PISA, comparó el tiempo de los alumnos en 2012. En España dedican 6,5 horas semanales frente a 4,8 de media entre los países industrializados.

Lo deberes escolares, según los padres de la pública, pueden generar “desigualdad” entre aquellos alumnos cuyas familias puedan pagar academias de refuerzo por la tarde y las que no. La OCDE también considera que puede  abrirse una brecha entre alumnos con más o menos recursos aunque defiende razones “muy sólidas” para asignar tareas después de clase como “ayudar a los estudiantes con dificultades”, asegurar que lo retienen en su memoria a largo plazo o dar un estímulo adicional para los estudiantes de altas capacidades.

Los padres de la pública reclaman también que se cumpla “íntegro” el periodo de clases, con una media de 175 días anuales pero con variaciones por comunidades autónomas y que los descansos no estén supeditados “a fechas religiosas”. Proponen adelantar a julio los exámenes de septiembre y que se impartan clases de apoyo durante el mes de junio, entre los días en los que acaban las clases y los que son los exámenes finales. “Necesitamos un debate profundo sobre los tiempos escolares, el calendario y los tiempos de exámenes”, pide Pazos.

“Entendemos que los deberes consolidan los conocimientos que se obtienen en el colegio, pero no pueden ser desproporcionados con la edad”, solicita por su parte José Antonio Rodríguez, director de programas de Concapa. “Un alumno de 1º de primaria no puede asumir dos horas de deberes diarios”, ejemplifica. La confederación de padres de centros católicos reclama “coordinación” entre los profesores de un centro para evitar “una carga excesiva para los estudiantes”. “El tema de los deberes es cíclico, todos querríamos que este debate estuviera consensuado”, añade Rodríguez. En España no existe normativa al respecto.

FUENTE: EL PAIS / 23 SEP 2015