Ignacio Morgado | El País
Pocos ejemplos hay en la historia más aleccionadores que el juicio del rey Salomón: la verdadera madre era la que prefirió quedarse sin su hijo antes que dejarlo matar. Viene a cuento porque, contrariamente a lo que pudiera parecer, la ambiciosa y cada vez mayor invasión del prefijo “neuro” en diversos campos del conocimiento puede acabar dañando la reputación social de la neurociencia. Neuromarketing, neuroeducación, neuroeconomía, neuroarquitectura, neurocreatividad, y también neurofilosofía son algunos ejemplos de esa invasión programática que no cesa. ¿Acaso está justificada? Analicémoslo… Leer más