Daniella dedicó su inscripción al reconocimiento de las víctimas del genocidio armenio de 1915: …Líder de lo sublime… la que hizo famoso el nombre de Armenia y justicia… que nadie quite mi nombre de la inscripción, concluyo, defiendo, expongo, que mi estela resuelva el silencio de este mundo.
Hamadi escribió: soy mujer, escogida por Dios, descendiente de la humanidad, que escucha obedientemente a su alma, famosa por su calidad, temida por su género, atrapo a mis enemigos con mi inteligencia…
Ream se encontraba entre dos lugares y dos culturas: Soy yo, escogida por ninguno, rechazada por todos, descendiente de aquellos que creen en la justicia y en la igualdad, que escucha obedientemente y que anticipa palabras de esperanza para solo oír desesperación, famosa por su insignificancia… que mi estela resuelva las angustias del mundo.
Extracto de los poemas de mis estudiantes de la universidad New York
Institute of Technology, Abu Dhabi 2011
La visión del docente a fin de año siempre aporta una perspectiva más sabia, crítica e informada de su práctica
El docente ahora puede poner el foco en su persona tras su paso por el año escolar escuchando a sus estudiantes y observando lo que ocurre en el aula. La determinación de seguir aprendiendo a desarrollar estratégicas pedagógicas efectivas, le permite evaluar su práctica educativa con un sentido crítico más agudo. Aunque requerido al terminar el año escolar, sé que es una tarea difícil en medio de la crisis que atraviesa el país en este momento. Sin embargo, siempre es útil repasar las diferentes estrategias pedagógicas utilizadas y examinar cuáles funcionaron bien y cuáles no.
A modo de una reflexión compartida, propongo revisar tres puntos: Alinear propósito y práctica, Diversidad tanto de contenido como de contexto y La promoción de habilidades creativas y críticas en los estudiantes. Estas reflexiones motivarán a los docentes a aplicar en el futuro nuevas acciones creativas en la enseñanza y el aprendizaje de la educación artística.
Como saben, soy una firme defensora de las posibilidades del arte y la cultura, y el impacto que puede tener una educación artística sólida en el desarrollo integral de los estudiantes. Es extraordinario el empoderamiento que los estudiantes pueden alcanzar a través de su interacción con las artes. Basta sólo leer los testimonios apasionantes que encabezan este artículo.
1) Alinear propósito y práctica: centrando la atención en la persona y en la capacidad de los estudiantes de aprehender nuevos conocimientos más que en la actividad misma.
Es de invalorable beneficio, apropiar y personalizar las actividades pedagógicas. Estas deben despertar la curiosidad de los estudiantes, estimular sus sentidos y encaminarlos a descubrir, a través de su sensibilidad, imaginación y creatividad, la relación que pueden establecer con el arte.
Encontré hace poco los tres testimonios de arriba, ejemplos de un ejercicio que he utilizado repetidas veces. El contexto qué mejor funcionó para la aplicación de esta estrategia pedagógica fue cuando la utilicé para motivar a los estudiantes antes de ingresar a ver una exposición de obras de Mesopotamia, organizada por el British Museum llamada Slpendours of Mesopotamia, Abu Dhabi, 2011.
Mis estudiantes y la mamá de una de ellas crearon una inscripción basada en el siguiente guion:
Título
Yo soy…
Escogido (a) por…
Descendiente de…
Quien escucha obedientemente a…
Más famoso (a) por
Más temido (a) por…
Atrapo a mis enemigos con…
Perfecto (a)…
El/la inteligente que…
Líder de…
Quien demuestra que…
Quien desinfecta a…
Quien desfila a…
Quien hizo el nombre de… famoso
Este es un regalo para todos los que vengan en el futuro a…
Que nadie quite mi nombre de la inscripción o inscriba su nombre en su lugar, que mi estela resuelva…
Nombre
El objetivo de la actividad era conocer el significado de una inscripción y establecer conexiones significativas con obras de arte de otra época a través de narrativas personales. Al mismo tiempo, y subrepticiamente, obligar a los estudiantes a volver la mirada hacia ellos mismos y explorar su cosmovisión, saberes y valores. Tenían que llenar los espacios en blanco y crear un poema con información social, emocional y cultural desde su punto de vista.
Al mismo tiempo, la idea era hacerlos tomar conciencia de algo singular: los objetos y artefactos de la antigüedad se hacían por encargo y seguían ciertas convenciones. Una de esas convenciones era tener una inscripción en la que se comunicaban detalles importantes del autor o del dueño. En una conferencia a la que asistí, investigadores del British Museum, revelaron que habían encontrado algunas inscripciones al revés. Este curioso dato indicaba que las inscripciones se trabajaban por separado en bloques portátiles que se insertaban luego en las obras.
Actividades de esta naturaleza facilitan el intercambio creativo y crítico de los estudiantes con el alma de los creadores y/o el contexto de las obras. Los estudiantes aprenden a utilizar las herramientas necesarias para construir conocimiento desde lo personal y a desarrollar una mirada introspectiva con información auténtica y culturalmente relevante para ellos. Los sitúa en una posición favorable para incorporar mayor creatividad e innovación al aprender y les permite desarrollar habilidades creativas y críticas a través suyo, y dentro del marco de lo artístico y lo estético.
También les enseña que no existe una manera única de responder e interactuar con el arte. Les permite comprender de manera más profunda quiénes son y su entorno en relación a lo que aprenden. También les brinda un mayor entendimiento de cada proceso y producto artístico dado que nada reemplaza el contacto directo e intercambio personal con las obras de arte.
2) Diversidad tanto de contenido como de contexto: la importancia de pensar y de hacerlo especialmente a través de los materiales para expresarse efectivamente utilizando los lenguajes artísticos, y a comunicar su significado y proceso.
Así como las expresiones y las manifestaciones artísticas y culturales no se crean en un vacío cultural, los estudiantes tampoco aprenden ajenos a su entorno, desprendidos de su potencial creativo, en un vacío cultural. Al igual que las obras de arte, ellos existen dentro de universos de significados. Estos son culturalmente determinados. Lo que constituye nuestro ser es un conjunto de saberes articulados por valores y códigos sociales. Estos están influenciados por contextos específicos. Unidos a su desarrollo evolutivo, estos universos de significados deben reflejarse en sus experiencias en el proceso creativo y de análisis crítico.
Desde el punto de vista del docente, la selección de las actividades y las situaciones de aprendizaje tiene que alinearse al propósito y a la práctica de su filosofía de enseñanza e intenciones educativas. Además, es necesario incluir las diversas voces de los estudiantes y la perspectiva personal que cada uno pueda tener. La educación artística ofrece un lugar para el desarrollo del pensamiento creativo y crítico en ellos, y a la expansión de sus ideas. Los docentes de arte, educadores o artistas educadores deben orientar sus esfuerzos en facilitar la expresión personal (de manera verbal y no verbal) en los estudiantes a través de los diferentes lenguajes del arte. El propósito es fortalecer la construcción de conocimiento utilizando las herramientas y los procedimientos propios de las artes. Por sobre todo, apoyar el desarrollo de sus múltiples identidades en los estudiantes, y generar en ellos intercambios significativos con otros, en una búsqueda reciproca de convivencia intercultural de respeto y equidad social.
Para ello, es necesario ser honestos y mantener una integridad entre lo que uno conoce, piensa y hace en las sesiones de aprendizaje. Esencial, poder examinar la relación que nos une al arte, conocer el valor que ocupa en nuestras vidas y en la de nuestros estudiantes. Este recorrido no es teórico, tiene que caminarse de la mano de experiencias vivenciales que permitan el desarrollo de la introspección, el autoconocimiento y la reflexión. De esta manera, es fácil extender nuestra curiosidad inicial para luego conocer el significado que tienen las artes en las culturas y sociedades de otros lugares y tiempos, y en la vida cotidiana de la gente. Es de vital importancia, que los estudiantes sean parte de ese conocimiento, y que lo vivan a través de sus emociones y experiencias. Contextualizar el nuevo conocimiento adquirido, les permite afianzar y ganar confianza en sus habilidades para aprender.
3) La promoción de habilidades creativas y críticas en los estudiantes. Este es el gran reto de todo docente de arte responsable y creativo.
Por un lado, el docente de arte tiene que humanizar el currículo amalgamando su práctica artística, educativa y cultural, priorizando lo que considera fundamental, y, a través de ese ángulo, impartir su conocimiento. Por el otro, tiene que crear las condiciones óptimas para activar la participación de los estudiantes en su propio desarrollo cognitivo, físico, social, artístico y cultural a través de las competencias del aprendizaje de arte sin interferir mucho. Su habilidad radica en poder hacer que los estudiantes mantengan una relación fluida entre la disposición y el potencial creativo e imaginativo, y su mundo interior en relación al entorno social y emocional más propicio para aprender. La coherencia y las acciones del docente, informadas por su experiencia en el desarrollo evolutivo de los estudiantes, determinan la manera más apropiada de diseñar aprendizajes significativos.
¿Cómo van los estudiantes a desarrollar su propia voz y configurar su mirada si los docentes sólo centran la experiencia artística en el desarrollo de actividades mecánicas? Al no conectar las ideas que motivan la situación de aprendizaje al entorno personal de los estudiantes ni a sus capacidades de producción y análisis de manera más profunda, se pierde la oportunidad de despertar en ellos la curiosidad de aprender, y de conocer a través suyo diferentes formas de hacer, pensar y sentir. Ellos deberían poder cuestionar el aprendizaje, experimentar diferentes perspectivas con el fin de preguntarse, ¿qué tiene que ver conmigo? ¿Me identifico con estas ideas? Si tienen la experiencia y madurez suficientes pueden ir más allá y ver si la enseñanza propuesta aplica a su familia, a su comunidad, región, sentido ético, valores, creencias, entre otros. Esta práctica crea espacios de reflexión muy necesarios.
Articular estos espacios de observación, creación y de análisis crítico para entender las acciones y la obra de otros, promueve interrelaciones y exploraciones compartidas. Indispensable poder interactuar con el proceso creativo de otros. Incluso con el de sus pares. La idea es darle a los estudiantes libertad para indagar su entorno sin miedo a través de sus ideas, experiencias previas y asociaciones. Con la experiencia ellos aumentan la capacidad de discernir, verificar y medir nuevos conocimientos y aprenden a comunicar mejor sus expresiones personales.
Para concluir
Estos tres puntos pueden movilizar al docente a seguir aprendiendo y a desarrollar estrategias pedagógicas cada vez más efectivas. Tal vez los ayuden a ver su práctica educativa desde otro ángulo y a buscar nuevos métodos y maneras más actuales de enseñar. Al mismo tiempo, es indispensable captar la atención de los estudiantes acercándolos con entusiasmo y dinamismo al aprendizaje.
El título del artículo apunta a otro factor importante. Muy a pesar de los esfuerzos que cada docente puede hacer, a veces se deja llevar por estrategias que suenan bien pero que tal vez no encajan del todo con su filosofía/práctica educativa. Para mantener la relación con los estudiantes y el aprendizaje bien orgánico, es esencial alinear propósito y práctica, y barajar una diversidad tanto de contenido como de contexto en la enseñanza de la educación artística siempre promoviendo las habilidades creativas y críticas en ellos.
Todo docente creativo y responsable sabe que organizar el aprendizaje implica establecer prioridades y supone un enorme esfuerzo de estrategia pedagógica. Es imprescindible estructurar y poner en práctica la implementación ordenada de las competencias del área. Ayuda mucho modelar decisiones creativas basadas en opciones personales y/o en las de otros creadores. Estas aterrizan el aprendizaje a acciones concretas. Finalmente, lo que cuenta es desarrollar el sentido creativo y crítico en los estudiantes.
Como docentes, el ideal es practicar y estar continuamente expuestos a la creatividad y a la innovación. Incluso en momentos difíciles como los que estamos viviendo ahora, abrir espacios de reflexión potencia nuestro desarrollo. Enhorabuena por ello.
